Carta de un funcionario

     Unos compañeros funcionarios de Murcia han escrito esta carta, la repartieron en la manifestación del Jueves 19 de Julio y nos invitan a sacar unas cuantas copias para repartirlas en la concentración del Lunes en la puerta de El Corte Inglés. Si cada uno saca unas cuantas, este mensaje llegará a muchos ciudadanos. 

       Estimado ciudadano murciano: 

       Si su concepto de funcionario es el de "vago-enchufado que vive a costa de sus impuestos" y se alegra de las congelaciones, recortes estatales, y los recortes de nuestro gobierno autónomo murciano, déjeme recordarle que: 

    -Si está usted enfermo (más le vale que no, porque tal y como están las cosas, o es usted rico o se muere), le atenderá un funcionario.

   -Si usted tiene que renovar o gestionar cualquier documento público (por el que tendrá que pagar tasas a partir de la nueva ley de presupuestos), le atenderá un funcionario. 

   -Si usted tiene hijos en edad escolar, y tiene que gestionar las matrículas (cada vez más caras) y las becas (cada vez más difíciles), y que les eduquen y les cuiden, le atenderá un funcionario.

  -Si necesita usted una subvención, o una ayuda, o una prestación por desempleo, o de cualquier otro tipo, le atenderá un funcionario.

   -Si necesita usted una licencia, un permiso, o cualquier otra autorización, le atenderá un funcionario. 

   -Si necesita usted seguridad o protección frente a delitos o ataques personales, le atenderá un funcionario.
   -Si necesita usted que le gestionen su demanda o su denuncia, y busca justicia, le atenderá un funcionario. 

     Además, ha de considerar que un funcionario no ha conseguido su puesto de trabajo fijo "a dedo2, sino que ha tenido que obtener una titulación y superar unas pruebas de acceso que le han costado unos cuantos años de estudio y sacrificio, que algunos tenemos salarios mil euristas, y que nuestra única ventaja es tener un trabajo estable (hasta nuevo "decretazo", probablemente). 

     Sepa además usted, que si a ese funcionario le recortan el sueldo, casi seguro: 

   -Dejará de tomarse el cortado en el bar donde trabaja usted o algún familiar suyo.
   -Dejará de consumir ropa o zapatos de la tienda donde trabaja usted o algún familiar suyo. 

   -Dejará de viajar en la compañía aérea o marítima donde trabaja usted o algún familiar suyo. 

   -Dejará de reservar el fin de semana en el hotel donde trabaja usted o algún familiar suyo.
   -Dejará de gastar más de lo estrictamente necesario en Alcampo, Carrefour, Mercadona, El Corte Inglés, Thader, Eroski, Nueva Condomina, etc., donde trabaja usted o algún familiar suyo. 

     Y que, en consecuencia, ante la bajada de ingresos, el empresario tendrá que despedirle (con una indemnización infame, gracias a la Nueva Reforma Laboral). 

     Créame, estimado ciudadano, yo no me alegraré cuando eso suceda, intentaré seguirle atendiendo con la mayor calidad que pueda, en el servicio público que usted demanda, y que yo también pago con mis impuestos.

Y DÉJEME RECORDARLE QUE LOS BANQUEROS, POLÍTICOS, PRESIDENTES, MINISTROS, CONSEJEROS, Y DEMÁS ALTOS CARGOS DE ESTE PAÍS Y DE ESTA COMUNIDAD AUTÓNOMA NO SON FUNCIONARIOS.

Firmado:  Un funcionario